Cuántos de cuentos sonríes
para mí, de artilugios hecha
cuántos cuervos consisten
en dos caballos mal atados:
alados de tremendos, dos
sílabas de vasto paisaje
meditadas por quiénes.
Que no es cuento, me dijo.
Que no es un cuento, me dijo.
Que de voces hartas debe sonar claro.
Y yo sé, de seguro, que son mejores
las palabras que, sin existir
(nota para pie: no usar las siguientes - purquiniento, docencasto, cantaricoto).
Que son sólo cifras, y no caben donde.
Que incompleta sentencia resta ciencia, y fuerza.
Acaso sí es
Sol golosina temblando
en ocaso tan terrible
para ti,don de dones
y para mí
casi donado tendonado.